6.9.08

La Nueva Biblia del Rock



Neon Bible (2007)
No hay dudas que Arcade Fire es una de las mejores apariciones de los últimos 10 años. En esta era del indie-rock, el post-punk y demás estilos de vanguardia, los canadienses seguramente serán nombrados en un quíntuple de mejores bandas de estos tiempos junto a: Arctic Monkeys, The White Stripes, TV on the Radio, y Wilco si obviamos sus tres primeros discos de los '90.
Pero volviendo a Canadá más exactamente a Quebec, donde los hermanos Win -voz- y Will -bajo y percusión- Butler y el resto de la banda adquirieron una iglesia de dicha ciudad para luego acondicionarla como estudio y grabar su segundo disco llamado "Neon Bible", sucesor de uno de los grandes discos de esta década "Funeral".
El primer corte del álbum fue la épica "Keep the Car Running" que contiene violines y chelos a gran velocidad arreglados por la multi-instrumental Régine Chassagne, quien vendría a ser como la mitad de la banda . En "Intervention" el órgano parece nunca haberse ido de la iglesia abandonada, volviendo a entonar una vez más el "Ave María", pero inmediatamente los arreglos de cuerdas cambian el rumbo, y Butler canta al máximo como si fuera Bruce Springsteen en "Born in the USA". El track "Black Wave/Bad Vibrations", es como habría sonado Joy Division en el '07. Win Butler deja el mic por un momento para que su mujer Régine cante una primer parte algo oscura, hasta que todo se apaga cuando Win pone su voz para la otra mitad casi tétrica.
La genial "Black Mirror" está a medio camino entre las huellas más marcadas de Arcade Fire que son: Echo & The Bunnymen y Joy Division. Y sí cabía una canción entre el último Pink Floyd y U2 esa sería "My Body is a Cage". Y por último el temazo de este gran disco de los canadienses, "No Cars Go" para que el planeta grite una y otra vez...Hey!!!...Hey!!!

Por Leo Juiz

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4.9.08

El Folk y su Estrella Favorita



Conor Oberst (2008)
Después de realizar el álbum más exitoso de su carrera con Bright Eyes - su anterior proyecto - llamado "Cassadaga" (2007), el cantante y songwriter de Nebraska lanzó su primer disco, homónimo, el cual tuvimos la oportunidad de escucharlo, casi en su totalidad, cuando Conor y sus nuevos compañeros de banda, The Mystic Valley Band, se presentaron en el festival de folk realizado en La Trastienda - si bajas con el cursor encontrarás la crítica de dicho show - en el mes de julio.
En esta nueva producción Oberst arma una banda con gente experta en el estilo folk. Nik Freitas, en guitarras, ya tiene cuatro discos editados y el último es excelente, "Sun Down" (2008); Nate Walcott, en teclados y corneta, sobreviviente de Bright Eyes, también tocó en Rilo Kiley y con Johnathan Rice entre otros; Jason Boesel, en batería y percusión, otro ex Bright Eyes y Rilo Kiley; Taylor Hollingsworth, en guitarras y coros, también tiene discos en las bateas del país del norte; y por último, el desconocido Macey Taylor en bajo.
"Cape Canaveral" es el primer track del álbum, con Conor golpeando con sequedad a su acústica, pero también haciendo algo grato con las cuerdas de la misma y su voz suena depresivamente bella. En "Sausalito", ciudad de California, la vida te sonrié y todo es más simple parece decir Oberst cuando canta: "We should move to Sausalito/Living's easy on a houseboat"; "Deberíamos irnos a Sausalito/ de vida fácil en un barco-rodante". En el folky "Get-Well-Cards" Conor suena descaradamente como Dylan pero sin culpa. Y en "Moab" la voz en el estribillo recuerda a Tom Petty. El country-rock de "I Don't Want to Die (in the hospital)" es simplemente brillante. Y por último, Conor aparenta ser un bandido rural en "Eagle on a Pole" con una melodía que recuerda a "La Memoria" de Gieco.
Paso a paso como diría "Mostaza", Oberst se está convirtiendo en uno de los mejores songwriter del movimiento folk. Y este disco es una prueba de eso.


Por Leo Juiz


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Noche de Indie-Rock y Láser



Bill Callahan en Niceto.
En un show casi íntimo, el cantante y guitarrista Bill Callahan presentó en Baires su primer trabajo como solista "Woke on a Whaleheart" con la particularidad de estar acompañado solo por su baterista Thor Harris. Parece que el caché no alcanzó para poder ver a toda su banda en plenitud. Pero mas allá de esto los dos se fusionaron de manera correcta. La voz de Bill suena mucho mejor en vivo mientras que su guitarra por momentos echaba humo. También fue digno el trabajo del baterista, que casi logran olvidar por completo al resto del grupo.
Hubo grandes canciones de su pasado en (Smog) como "I Was a Stranger" y "Cold Blooded Old Times" y para los que solo conocen su último trabajo sonaron "Diamond Dancer"; "Sycamore" y "The Wheel" que fueron las más celebradas por las pocas palmas que había en el lugar.
Un lugar que no permite fumar y que si lo haces, la gente encargada de la seguridad de Niceto te apunta con un láser desde las alturas oscuras del lugar sin saber bien con exactitud, si detrás de esa luz roja punzante hay un arma apuntándote a la cabeza o simplemente es un láser, por las dudas no lo averigué, ni bien me apuntaron estaba pisando el pucho fuertemente contra el piso para asegurarme de que esté bien apagado.
Basicamente fue un show que entretuvo, con un cantante que lleva al folk y al indie-rock en una valija algo vieja, pero para nada gastada. Aunque si hay otra posibilidad de volver a verlo quisiera que tenga mas gente detrás, tocando un bajo, un teclado y algo de bronce.



Por Leo Juiz


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El Folk-Indie se Viste de Mujer



The Reminder (2007)
La cantante y compositora Feist, es otra artista, tal vez de las más brillantes, del movimiento rock-indie canadiense. "The Reminder" es el nombre de su segundo y último álbum, el sucesor de "Let it Die" del 2004, por el cuál gracias a su gran éxito la chica de flequillo comenzó a encabezar los line's up de los festivales más importantes del mundo.
Pero antes de empezar con su última producción, haremos un poco de historia. Leslie Feist nació en la provincia Nova Scotia, a orillas del atlántico, en Canadá. En su post-adolescencia formó parte de bandas punks que no tuvieron trascendencia hasta llegar a ser uno de los miembros de Broken Social Scene, una de las mejores bandas indie's del país del norte. Este grupo tiene a un McCartney y un Lennon que son Brendan Canning y Kevin Drew, pareja de Feist, respectivamente, quines tienen leves participaciones en este disco.
Ahora bien, ya sabemos quién es, sepamos que hace. El primer track del álbum, "So Sorry", con la participación de James Lidell en voces, de boca cerrada, es una balada folky que contiene guitarra acústica y una voz estupenda de Feist que hace imposible no perdonarla. Uno de los instrumentos que más está sonando en la escena indie por estos días es el vibraphone - otro es el banjo - y en "The Reminder" no podía estar ausente como en "I Feel it All" una de las canciones más bellas del disco.
La reinterpretación de "Sea Lion Women" de Nina Simone en "Sealion" es excelente desde la instrumentación (el sonido añejo de guitarra) hasta las voces (de color negras) que acompañan a Feist, quién no toma aire en ningún momento. Los buenos temas abundan en esta producción como "Past in Present" y "The Water". Pero el primer corte que fue "1234" se lleva todos los laureles, con banjo, corneta y piano como protagonistas, hacen la mejor canción de esta genial obra de Feist, que no tiene desperdicio.


Por Leo Juiz

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Los Nuevos Reyes de New York



New York parece tener a sus nuevos reyes. Y ellos son los Vampire Weekend un cuarteto de jovenes influenciados por The Beatles, The Kinks y Talking Heads . Sus integrantes se conocieron en la Universidad de Columbia estudiando literatura y tras algunos shows para sus amigos presentando algunas canciones propias firmaron para el sello XL Records y grabaron uno de los mejores discos de este año inconcluso.
La rivalidad algo absurda en el rock siempre existió, como lo fue en los 60', de un lado los Beach Boys y del otro, en el viejo continente, los Beatles. O en el nacimiento del punk en los 70', Ramones contra Sex Pistols. En estos tiempos la historia se repite? En este rincón los ya consolidados Arctic Monkeys y en el otro Vampire Weekend.
El gran álbum homónimo de los neoyorkinos tiene geniales momentos, y lo comprueba los soberbios dos minutos de duración del primer track: "Mansard Roof"; el sonido de la guitarra revela el origen del grupo, y la batería de Christopher Tomson suena como la de un granadero cabalgando en un desfile. En "Oxford Comma" el teclado ejecutado por Rostam Batmanglij recuerda a los Kinks. El ingenioso ska "A-Punk" tiene doble nacionalidad, afro-británico. El irresistible ritmo nuevamente afro que le dan con bangos en "Cape Cod Kwassa Kwassa" donde el cantante, Ezra Koening, versifica Louis Vuitton con reggaeton y Bennetton con Peter Gabriel es genial. Las cuerdas en "M79" visten con tanto vértigo al track como "Neighborhood # 3 (Power out)" de Arcade Fire.
La insinuación a veces mata, muchas bandas de rock realizaron discos debuts geniales, pero en los sucesivos por presiones, o poca originalidad frustraron. Esperemos que Vampire Weekend no sea un caso.


Por Leo Juiz

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Muy Buen Debut del ex Smog



Bill Callahan lanzó su primer disco solista, luego de estar casi dos décadas al frente de una de las mejores bandas de indie rock conocida como (Smog), el último disco data del 2005 y se llamó "A River Ain't Too Much to Love" y fue una de las mejores producciones de su banda.
Pero no se asusten que la receta de Bill sigue siendo la misma: Indie-Folk + letras con mucha ironía, y hasta con cierto sentido del humor, y una voz que suena entre Johnny Cash y David Bowie.
"Woke on a..." es un disco de apenas nueve canciones pero no por eso deja de ser un álbum estupendo. El primer tema es "From Rivers to the Ocean" un folk nostálgico con un hermoso piano y violines llorones. Una de las mejores canciones del disco es: "Diamond Dancer" un suave country cuyo bajo repetitivo pero audáz lleva la batuta, al igual que el violín oportuno de una tal Elizabeth Warren. En "The Wheel" Callahan juega a ser Neil Young. En una canción que parece haber sido grabada en un bar de Mississippi, por todas esas voces que se oyen por detrás. "Sycamore" es el tema pop del álbum, y es sencillamente agradable. "Day" podría ser una canción de Devendra Banhart sino fumara mientras graba.
El disco cierra con un digno country: "A Man Needs a Woman or a Man to be a Man" donde las guitarras se postean comenzando por la acústica hacia la eléctrica.
Este primer trabajo de Callahan será presentado en breve en Buenos Aires, y más exactamente en Niceto, como parte de su mini-gira por Sudamérica, y por supuesto ahí estaremos presenciando su primer show en Baires. Hasta entonces.


Por Leo Juiz

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